¿Sufres dolor de ovarios, sangrado o te irritas sin motivo? Cuidado, ya que puedes estar frente a una endometriosis, la enfermedad silenciosa, llamada así porque cuando presenta síntomas generalmente está peligrosamente avanzada. Se conoce poco de ella, aunque es masiva, porque afecta a 150 millones de mujeres en el mundo. Sigue leyendo y documéntate bien al respecto.
¿Qué es la endometriosis?
La endometriosis es producto de un desorden ginecológico, según los últimos datos, afecta 1 de cada 10 mujeres, en término porcentual 10% de la población femenina mundial. Cuyas cifras se acercan peligrosamente a la diabetes.
Te preguntarás, ¿por qué se dice de la endometriosis la enfermedad silenciosa?, este seudónimo se debe al tiempo que transcurre desde su gestación hasta que aparecen los síntomas y su correspondiente diagnóstico, el cual es aproximadamente de 8 años.
En este período no se manifiesta ningún síntoma visible o sensitivo (salvo eventuales dolores pélvicos), por ende, se mantiene en anonimato casi en todos los casos. Esto ocurre porque quienes padecen endometriosis pueden creer por años que el dolor que experimentan es menstrual, por tanto, normal.
Por su parte, el sistema de salud poco ayuda en el diagnóstico temprano en buena parte de los casos, ya que omite algunos síntomas que pudieran relacionarse con la endometriosis. Inclusive, el 70% de adolescentes que consultan por dolores crónicos en su período menstrual son diagnosticadas con endometriosis de adultas.
Ahora bien, la endometriosis es una enfermedad silenciosa porque se asocia a la menstruación y la fertilidad. De esta manera, el cuerpo de una mujer en edad fértil mensualmente se prepara para procrear. Es decir, cada 28 días su útero es envuelto por una mucosidad especial llamada endometrio.
Una porción de este tejido endometrial se expulsa por la menstruación, una vez el útero percibe que no hubo procreación.
Ahora bien, la endometriosis tiene lugar justamente cuando el citado tejido afecta a otros órganos pélvicos, distintos al útero, es decir, las trompas de falopio, intestinos, vejiga, entre otros.
Por ende, cuando el cuerpo trata de expulsar este tejido, le resulta imposible, en consecuencia, busca un escape sangrando y desarrollando lesiones internas, en cuyo proceso causa dolores pélvicos crónicos.
Este dolor puede presentarse solo durante la menstruación, por lo que suele asociarse a esta fase, hasta que transcurrido el tiempo puede convertirse en dolores graves durante todo el mes. Es decir, que tiene un largo período de desarrollo.
Síntomas
La endometriosis puede aparecer de forma diversa, aunque por lo general son comunes en todas las mujeres los siguientes síntomas:
- Calambres pélvicos.
- Sangrado abundante e irregular.
- Fuertes dolores pélvicos.
- Dolor durante el acto sexual.
- Sangrado rectal.
- Náuseas.
- Sangre en la orina.
- Defecación dolorosa.
- Quistes en los ovarios, llamados endometriomas.
- Cansancio extremo.
- Irritación.
- Depresión.
Estos síntomas pueden ser distintos en cada mujer, estar o no presente, o no relacionarse con la gravedad del caso. Esto conlleva a su diagnóstico tardío o dificultad para ello.
Adicionalmente, la endometriosis puede causar infertilidad, según se ha detectado en mujeres con esta patología, hasta en el 50% de los casos. Sin embargo, la endometriosis no es calificada como mortal, por lo general, desaparece en la etapa de la menopausia.
No obstante, durante su actividad, es capaz de deteriorar la calidad y estilo de vida de la mujer de manera considerable.
Causas
En cuanto a las causas de la endometriosis, se manejan algunas teorías. Como se señaló anteriormente, es una enfermedad silente y desconocida, sin embargo, se cree que obedece a un desorden inmunológico asociado a un factor inflamatorio. Otros especialistas sostienen que se relaciona con un desorden hormonal, acompañada con una alta carga genética/hereditaria.
Tiene además, algunas manifestaciones clínicas de amplio espectro, que implican desde su predominio asintomático numerosas intervenciones. Valorada como una enfermedad crónica/severa, toda vez que demanda de un plan de atención médica a largo plazo, a fin de optimizar el tratamiento médico aplicable y evitar cirugías repetitivas.
Importancia del diagnóstico temprano de la endometriosis
Es de suma importancia detectar y tratar la endometriosis a tiempo, ya que de no hacerlo, el 30 o 50% de portadoras tendrá problemas para embarazarse de manera natural.
De acuerdo a los especialistas, la razón es por no tratarse tempranamente, por lo que desarrolla y puede llegar a dañar las trompas de falopio y ovarios. Motivo suficiente para el diagnóstico y tratamiento oportuno, evitar su agravamiento y estudios avanzados más costosos.
Resulta importante también, que las mujeres con endometriosis estén alertas y conscientes del alto riesgo de infertilidad. Por una parte, tratarse a tiempo para controlar sus efectos, y por el otro, embarazarse lo más pronto posible, o congelar sus óvulos antes de los 35 años.
Factores de riesgo
Como factores de riesgo se relacionan básicamente los hereditarios, es decir, que una madre o hermana tenga y haya padecido de endometriosis. Igualmente, afecta el desarrollo precoz con su correspondiente menstruación.
Tener ciclos menstruales irregulares (polimenorrea o hipermenorrea), es decir, poco o mucho sangrado, haber sido objeto de cirugías en el útero, luego de una cesárea o raspado.
Factores psicológicos
El solo hecho de infertilidad a consecuencia de la endometriosis es causa de estrés y ansiedad. Sumado a los efectos físicos producto del dolor severo, que eventualmente incapacita. Todo este contexto afecta sus emociones, conllevando a la depresión.
Incluso, según la gravedad es capaz de afectar el desempeño habitual, según datos aportados por un estudio a 14 mil mujeres con endometriosis, buena parte de estas vio comprometido sus planes de vida. Como educación, profesión, relaciones interpersonales, y obviamente, la salud mental.
De esta población, el 50% de mujeres que luchan con la endometriosis, admitieron pensar en algún momento el suicidio como salida.
Esto deja ver claramente lo importante que una mujer con endometriosis conozca y gestione su condición o enfermedad silenciosa, pues esto permitirá afrontar las dificultades con optimismo y seguridad.
Este escenario obliga a la paciente y médico tratante a definir un plan de atención integral, que implique un tratamiento multidisciplinario riguroso, con control en especialidades como: ginecología y psicología, medicina interna y alternativa para el dolor y mejorar la calidad de vida.
¿Cómo minimizar los síntomas?
Lidiar con los efectos de la endometriosis no es tarea fácil, porque no es solo manejar dolores crónicos en la menstruación, sino potenciales infecciones, cirugías, etc. Por ello lo ideal es el acompañamiento médico y seguir algunos consejos prácticos:
- Informarse adecuadamente, pero sin entrar en pánico.
- Buscar grupos de apoyo, hoy en día es más sencillo gracias a internet y redes sociales.
- Ingerir tratamientos hormonales, para minimizar los síntomas y mejorar la calidad de vida.
- Consulta médica periódica, en especial en caso de problemas intestinales.
- Optar por tratamientos naturales especiales para la endometriosis para mitigar sus síntomas.
- Asumir una dieta baja en ingredientes inflamatorios, para mejorar la endometriosis.
- Usar métodos alternativos, como calor local para disminuir la sensación de dolor.
- Tratar el estrés con meditación, yoga, relajación, música, etc.
- Compartir experiencias personales y profesionales.
- Ingerir suplementos y vitaminas.
- Maximizar la ingesta de alimentos orgánicos.
- Procurar estar saludable con actividad física regular.
Se debe reiterar, que en la endometriosis lo más importante es mantener una buena actitud para gestionar adecuada y positivamente. Esto conlleva a deslastrarse de viejas creencias sobre el dolor menstrual, el cuerpo no está diseñado para soportar dolor, por tanto, es tiempo de aceptar y visibilizar la endometriosis.